Dinero. Tienes billetes, tienes monedas… todo es dinero. ¿O no lo es? En la mayoría de los casos, el dinero no es más que un trozo de papel o una moneda que tiene valor porque el gobierno lo dice. La mayoría de las monedas del mundo, conocidas como monedas fiduciarias, no están respaldadas por nada, sino por la autoridad de un gobierno.
Una moneda fiduciaria es un dinero que un gobierno ha declarado de curso legal, pero que no está respaldado por un producto físico. Así, el dólar estadounidense, el euro y la libra esterlina son monedas fiduciarias. Aunque ya no existen monedas respaldadas por materias primas puras (a excepción del oro), hubo un amplio periodo de tiempo en el que muchos gobiernos diferentes emitieron su propia moneda.
El valor de la moneda fiduciaria viene determinado por lo que todos acordamos que vale. Y eso es todo lo que se necesita. Aunque este tipo de moneda no está respaldada por un producto físico, el dinero fiduciario tiene valor porque un gobierno ha declarado que lo tiene. En otras palabras, la creencia de que se pueden utilizar fichas como monedas, billetes o dígitos electrónicos en la cuenta bancaria como moneda de curso legal para intercambiar por bienes y servicios hace que esas fichas sean valiosas.
Para profundizar en lo que hace que las criptomonedas y la tecnología Blockchain subyacente sean tan atractivas y disruptivas, tenemos que empezar con algo de historia del dinero fiduciario. El término «fiat» se refiere a un decreto gubernamental. Los bancos centrales controlan la oferta y la demanda de dinero fiduciario mediante decisiones de política monetaria que orientan acciones como la flexibilización cuantitativa o los ajustes de los tipos de interés. Las criptomonedas y los activos digitales se basan en los mecanismos Proof of Work o Proof of Stake que validan la red y mantienen su resistencia y descentralización. Otra diferencia importante entre los dos sistemas de divisas es la forma en que se crean. El Bitcoin, como la mayoría de las criptomonedas, tiene un suministro limitado y debe ser minado, mientras que los bancos centrales pueden imprimir cualquier cantidad en cualquier momento.
Las criptomonedas ofrecen una alternativa al dinero fiduciario emitido por el gobierno y tienen una serie de características que las hacen atractivas para muchos usuarios. Las criptomonedas no tienen contrapartida física, están descentralizadas, no tienen fronteras y son irreversibles.
El mayor problema al que se enfrentan las criptomonedas hoy en día es la volatilidad. Muchas personas simplemente no se sienten cómodas convirtiendo su dinero fiduciario en criptomoneda, aunque crean en el futuro crecimiento de la tecnología. AscendEX Earn proporciona una manera de evitar algunas de las trampas de la inversión en criptomoneda sin dar la espalda a la oportunidad por completo. Es el siguiente paso para permitir una mayor adopción de las criptomonedas, y podría allanar el camino para que otras empresas hagan lo mismo.
La moneda fiduciaria no va a ir a ninguna parte en breve. Para los que hemos crecido en Estados Unidos, es difícil imaginar lo que puede suponer tener que depender de la moneda de otro país. Ambos tipos de moneda (centralizada y descentralizada) tienen sus pros y sus contras, pero una cosa es cierta: aunque la moneda fiduciaria no es especialmente emocionante, es mucho más interesante que las monedas de hojalata.